“ Pero tú eres el que me sacó del vientre; El que me hizo estar confiado desde que estaba a los pechos de mi madre.” Salmo 22:9
LECTURA BIBLICA 1ª. REYES 3: 16-28
LECTURA BIBLICA 1ª. REYES 3: 16-28
Es hermoso tener una madre conforme al corazón de Dios, una madre que es sabia, que es prudente, que ama incondicionalmente, que sus hijos se levantan y la llaman bienaventurada, Gracias a Dios por la mía, porque es un ejemplo de FE y de AMOR, es una mujer que cuando se cae no se queda en la derrota, sino que cada día busca la Victoria a través del Poderoso de Israel, que los obstáculos los ve no como una lucha, sino como una oportunidad para ver que la Gloria de Dios se manifieste, para que Dios obre un milagro, yo puedo decir de mi Madre “muchas mujeres hicieron el bien, mas tu sobrepasas a todas” que nuestro Dios nos ayude a ser mejores Madres como dice la Biblia en Génesis 49:25
Por el Dios de tu padre, el cual te ayudará,
Por el Dios Omnipotente, el cual te bendecirá
Con bendiciones de los cielos de arriba,
Con bendiciones del abismo que está abajo,
Con bendiciones de los pechos y del vientre.
En algunos casos los hijos no conocieron a su madre, o la conocieron y por alguna situacion ya no la vieron, Dios viene a tomar el lugar de Padre y Madre, porque dice la palabra de Dios en el Salmo 27:10 "Aunque mi padre y mi madre me dejaran, Con todo, Jehová me recogerá", y en Isaias 49:15 dice ¿Se olvidará la mujer de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque olvide ella, yo nunca me olvidare de ti"
En la lectura de 1ª. Reyes, se habla de 2 mujeres que habían tenido un hijo cada una, pero a una se le había muerto ya que la madre se acostó sobre él bebe y como no se quería quedar sin hijo, se robo el hijo de la otra mujer diciendo que era de ella y le cambio mientras dormía el hijo vivo por el muerto, por esta situación fueron delante del rey Salomón y cada una decía que el hijo era de ella, la palabra de Dios dice que por esta razón sucedió lo siguiente:
“El rey entonces dijo: Esta dice: Mi hijo es el que vive, y tu hijo es el muerto; y la otra dice: No, mas el tuyo es el muerto, y mi hijo es el que vive. Y dijo el rey: Traedme una espada. Y trajeron al rey una espada. Enseguida el rey dijo: Partid por medio al niño vivo, y dad la mitad a la una, y la otra mitad a la otra. 1ª. Reyes 3:24-26
Después de que el Rey pidió la espada para partir el niño, vemos la reacción de cada una de las mujeres, la verdadera madre dijo “dad a esta (mujer) el niño vivo y no lo matéis, pero la madre usurpadora dijo “ni a mí ni a ti, partidlo”, la verdadera madre prefería dejárselo a la mujer que estaba mintiendo, antes de que su hijo fuera partido en 2, pero la que no era la madre no le importo que lo partieran, y el rey Salomón al ver el comportamiento de cada una pudo juzgar con la sabiduría de Dios, quien era la verdadera Madre “Entonces el rey respondió y dijo: Dad a aquélla el hijo vivo, y no lo matéis; ella es su madre”
Mujer con Visión y Poder, en esta reflexión vemos como una verdadera madre es capaz de negarse a ella misma, sufrir por su hijo con tal de que el viva, el amor de una Madre debería de ser una vislumbre del Amor de Dios, si cada una de nosotras amamos a nuestros hijos con el amor ágape, para nuestros hijos no será difícil comprender el amor de nuestro Padre Celestial en 1ª. Tim. 2:15 dice hablando de la mujer “Pero se salvará engendrando hijos, si permaneciere en fe, amor y santificación, con modestia.”, es un privilegio grandioso que nos da nuestro Dios para ser un ejemplo para nuestros hijos del amor de Dios “Y les he dado a conocer tu nombre, y lo daré a conocer aún, para que el amor con que me has amado, esté en ellos, y yo en ellos” Juan 17:26
Alejandrina Lopez